De cualquier tamaño?
Ya no dependemos de formatos estándar de pizarras. Se puede crear una superficie del espacio que se necesite. De suelo a techo y los metros que sean necesarios. Se panelará cubriendo todas las necesidades.
Las mamparas y separadores de nuestras oficinas y zonas de trabajo son áreas de gran superficie, que más allá de proporcionar intimidad o aislamiento, puede servirnos para mucho más. Son nuevos planos verticales que se alzan a la visión, que podemos utilizar para la comunicación. Podemos reforzar la imagen corporativa o contribuir a crear ambientes agradables. Tanto en paños ciegos de maderas, aluminio, o prefabricados, como en paños trasparentes de vidrios, podemos incorporar contenido gráfico. Ya sean logotipos, imagen o diseños específicos. Combinando, además del diseño en si de los motivos, el uso de materiales y acabados diferentes. En la actualidad podemos utilizar una gran gama de materiales auto adhesivos, no solo los vinilos tradicionales de colores, o el vinilo efecto ácido. En la familias de los vinilos además de las gamas de colores existe una diferenciación que pocas veces se tiene en cuenta, la transparencia. Los vinilos pueden ser trasparentes, traslucidos y opacos. De la combinación de estos grupos se pueden conseguir efectos concretos muy diferentes. De igual modo el vinilo ácido tradicional es un acabado por explotar. Existen fabricaciones en colores de este tipo de material para hacer nuevas combinaciones, y la más importante novedad, es un producto imprimible. Así se puede incorporar cualquier creatividad en medio de un paño de vinilo ácido, con el bonito efecto diferenciador dotado a la vez de profundidad y ligereza.
Todos iguales ante la LUZ?
Debemos recortar los tres tipos de vinilos en función de la luz que trasmiten, que a menudo se olvidan o confunden.
Pueden ser:
TRASPARENTES: Pasa la luz y vemos bien a través, aunque se adivina, cuando no tiene impresión, que hay un film.
TRASLUCIDOS: Pasa la luz y solo se adivinan formas muy próximas a contra luz.
OPACOS: No pasa nada de luz y no se ve a través, independiente de la luz que haya en uno y otro lado del cristal.
Normativa referente a las superficies acristaladas:
«Las grandes superficies acristaladas que se puedan confundir con puertas o aberturas estarán provistas, en toda su longitud, de señalización visualmente contrastada situada a una altura inferior comprendida entre 0,85 y 1,10 m y a una altura superior comprendida entre 1,50 y 1,70 m. Dicha señalización no es necesaria cuando existan montantes separados una distancia de 0,60 m, como máximo, o si la superficie acristalada cuenta al menos con un travesaño situado a la altura inferior antes mencionada». Código Técnico de la Edificación.